
Me dijeron de ser siempre prudente. Me aconsejaron siempre escuchar, estar atenta, ceder pero no sin triunfar. Me pidieron que entendiera, que respetara, que estudiara y que valorara. Me mostraron a las personas como tienen que ser queridas para que la quieran a una de la misma manera.
Me cultivaron en la fe de nuestro señor para que nunca pierda las esperanzas, por más que las adversidades que se presentaran a lo largo de la vida sean duras.
Y yo simplemente mentí, ultrajé, robé y maté. ¿Qué me dicen de eso?
Puede besar a mi culo.
(En el nombre del padre, del hijo y del espíritu santo)